El 29 de agosto
La iniciativa está vigente desde que el 29 de agosto de 1900 el Consejo Nacional de Educación instituyó esa fecha como el Día Nacional del Árbol, que se celebra oficialmente desde 1901.
Fue Estanislao Zeballos quien dio origen y promovió la celebración para concientizar sobre el cuidado y la protección de las superficies arboladas desde la política pública.
Contar con suficientes espacios verdes públicos en un territorio determinado vincula con el bienestar de una población. En este sentido, nuestra ciudad está muy bien posicionada en cuanto a ese indicador –uno de los que se tienen en cuenta para evaluar la calidad de vida- con un promedio de 24,3 metros cuadrados de espacio verde per cápita. Es un valor muy por encima de los mínimos sugeridos por Organismos Internacionales, que se orientan entre los 10 y 15 metros.
Los árboles son uno de los activos principales cuando se habla de espacios verdes públicos. En esa línea, el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad el 5 de diciembre de 2019 el Plan Regulador de Arbolado Público 2019/2023. Ese programa, surgido en el marco del Acuerdo del Bicentenario, es el resultado de un trabajo mancomunado dentro del Consejo del Arbolado Público.
DIEZ MIL ÁRBOLES PARA EL BICENTENARIO
El director de Espacios Verdes Públicos del Municipio, Luciano Jaureguiber, dio cuenta del estado de avance del programa: “Llevamos plantados 6 mil árboles y en lo que resta de 2021 planeamos colocar otros mil”.
Si bien esos números son los chequeados, el funcionario estima que hay algunos más que deben ser agregados a las planillas. Surgen del envío de algunos ejemplares por el gobierno de la Provincia y de particulares que, por ejemplo, autorizados a retirar un árbol donan otros diez para evitar que se genere un pasivo ambiental.
Este plan tiene como objetivo la plantación gradual de más de 10.000 nuevos árboles en diversas zonas de la ciudad durante 5 años, a razón de 2.023 ejemplares por año.
Los involucrados en el programa han redoblado esfuerzos para compensar lo acontecido en 2020, cuando, en el inicio de la pandemia de Covid-19, se plantaron apenas medio centenar de árboles.
“Estamos esperanzados y trabajando fuerte para terminar este año con siete mil árboles y eso nos dejará en buena posición para cumplir con la meta que nos establecimos, pues tendremos todo el 2022 y unos meses de 2023 para plantar el remanente”, aseguró Jaureguiber.
¿CÓMO NOS AYUDAN LOS ÁRBOLES?
• Captura de carbono: los árboles absorben el CO2 (principal causante del calentamiento global), removiendo y almacenando el carbono al tiempo que liberan oxígeno al aire.
• Regulación de la temperatura: los árboles refrescan la ciudad hasta 10°C.
• Ahorro de agua: la sombra de los árboles disminuye la evaporación del agua de los céspedes. La mayoría de los árboles recientemente plantados necesita solo 60 litros de agua por semana en primavera, a medida que los árboles transpiran, aumentan la humedad atmosférica.
• Generación de oxígeno: en un año, una hectárea de árboles adultos puede proporcionar oxígeno para 10 personas.
• Amortiguamiento del impacto de fenómenos naturales: los árboles reducen el escurrimiento del agua, atrapando el agua de lluvia y permitiendo así que fluya por el tronco y a la tierra que está debajo del árbol. Esto evita que las aguas de lluvia se lleven los contaminantes a los ríos, actúan como una especie de esponja que filtra naturalmente el agua y la utiliza para alimentar el suministro de agua subterránea.
• Protección y recuperación de suelos: en las laderas de las montañas y pendientes de los ríos y arroyos, los árboles ayudan a detener la escorrentía y mantener el terreno en su lugar, actuando como barreras naturales contra inundaciones o desbordes de los cauces naturales.
• Barrera contra ruidos: educen la contaminación acústica, ya que proporcionan una barrera que protege a los hogares de las calles y zonas industriales cercanas.
• Biodiversidad: proporcionan excelentes hogares para pájaros, abejas, insectos y otras especies.
• Paisaje y recreación.
• Filtros que limpian el aire: los árboles absorben los olores y gases contaminantes y filtran las partículas contaminantes del aire, atrapándolas en sus hojas y corteza.
• Refugio para los humanos.
• Ahorro energético: tres árboles colocados estratégicamente alrededor del hogar de una familia pueden recortar hasta en un 50 por ciento la necesidad de usar el aire acondicionado en el verano.
• Aumento del valor inmobiliario: la belleza que dan los árboles bien plantados a una propiedad, su calle y vecindario circundantes puede aumentar su valor en hasta un 15 por ciento.
• Protección de los rayos ultravioletas: los árboles reducen la exposición a los rayos UV-B en aproximadamente un 50 por ciento.
• Alimento: la presencia de árboles con frutos apetitosos para la avifauna urbana y la vida silvestre son un gran recurso para el mantenimiento de estas especies en la ciudad.
SOBRE EL CAP
El Consejo del Arbolado Público fue creado en 2001 con el fin de colaborar con el Estado Municipal y prestar apoyo para la difusión de conocimiento, concientización y todo lo que contribuya al cuidado y preservación, además de denunciar irregularidades que se manifiesten en detrimento del cuidado y preservación de los arboles dentro de la ciudad.
Desde la organización invitan “a todos y todas las Tandilenses a pensar y reflexionar sobre la cantidad de beneficios ecosistémicos que nos brindan los árboles y sobre la necesidad de cuidarlos y preservarlos”.
Finalmente, reiteraron que las personas interesadas en contactarse con el Consejo del Arbolado Público pueden escribir un mail a arboladopublicotandil@gmail.com.