Las comisiones de Interpretación y Asuntos Legales y de Cultura y Educación sesionaron este jueves en conjunto para estudiar en detalle el texto del proyecto presentado por el edil del Frente Renovador Pablo Díaz Cisneros sobre las pintadas vandálicas.

Al término de una sesión de trabajo que consideró positiva, la concejal Romina Mapelli delimitó la materia de lo que considera el verdadero problema: "El tema que más preocupa es la firma, ya que el grafiti, por lo general, no es una acción vandálica sino expresión social y cultural; la mayoría de las veces son pinturas grandes, que llevan horas de trabajo y existe autorización para usar el muro elegido".

"Las firmas (tags) por otra parte, son esas inscripciones breves y sin otro sentido que dejar sentado que el autor pasó por el lugar, dejando su marca distintiva", puntualizó la edil de la UCR.

Marcada la diferencia entre grafitis y tags, explicó que los integrantes de su bloque tienen dudas con respecto a la parte sancionatoria del proyecto. Es que las pintadas están tipificadas en el Código Penal, alcanzadas por el artículo 183 que versa sobre delitos contra la propiedad. "La pregunta que nos surge es si tenemos potestad para regular sobre hechos que están tipificados como delito o si, de pretender hacerlo, estaríamos violando la jerarquía de las leyes", planteó la legisladora municipal.

Por ese motivo los concejales que participaron de la reunión acordaron enviar el proyecto a la Secretaría Legal y Técnica del Municipio a fin de que esta oficina emita una opinión que permita determinar si una ordenanza sería viable o colisionaría con leyes superiores que legislan la materia.

En paralelo, se convocará para la semana entrante a los jueces de faltas y de menores para que den su punto de vista sobre las herramientas legales de que disponen para intervenir cuando se logra identificar a los autores de pintadas vandálicas, como ocurrió en dos oportunidades recientes gracias al sistema de cámaras de seguridad. "Queremos saber cómo actúan cuando se encuentran con casos puntuales y si se logra sancionar de algún modo a los causantes", resumió la concejal del oficialismo.

Prevención

En el encuentro también abordaron la propuesta de Rogelio Iparraguirre (FpV) de crear un centro de expresiones artísticas. Sin descartar la idea, Mapelli dudó que sirva para atraer a los "firmeros" porque no parecen estar buscando autorización para expresarse sino que más bien los atrae que esté prohibido lo que hacen.

Además recordó que la dirección de Cultura y Educación ha comenzado a trabajar con artistas callejeros para que puedan hacer sus grafitis en muros autorizados.

"Nos estamos ocupando del tema de los grafitis y reconocemos las firmas como el verdadero problema, pero queremos que nuestra intervención sea seria y no caer en ideas bienintencionadas que después no sean viables", resumió Mapelli.