El concejal Matías Meli participó en Azul de una jornada técnica regional sobre “buenas prácticas agronómicas en la aplicación de fitosanitarios”, llevada a cabo en el Salón Auditorio de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional del Centro, con sede en Azul.

Al encuentro organizado por la mencionada facultad y el Colegio de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires concurrió buen número de profesionales, estudiantes avanzados, representantes de municipios de la región y entidades públicas y privadas.

Meli, quien asistió en su rol de presidente de la Comisión de Producción, Trabajo y Medioambiente del Concejo Deliberante, destacó “el interés de los profesionales del ámbito agronómico por el manejo de agroquímicos”. En esa línea se desarrolló la presentación del ingeniero Víctor Juan, profesor asociado de Terapéutica Vegetal de la Facultad de Agronomía, quien tituló su ponencia “Buenas prácticas agrícolas: manejo responsable de productos fitosanitarios”.

En Tandil la cuestión cobra una dimensión mayor a la luz de la Ordenanza 13.371 promulgada el 23 de mayo de 2013, que tiene por objeto regular hasta 2017 la ubicación de los depósitos de productos fitosanitarios. Según el texto, después del plazo que vencerá durante ese año todos los emprendimientos deberán mudarse fuera de la zona urbana y suburbana.

Atentos a esta norma, desde el Círculo de Ingenieros Agrónomos de Tandil (CIAT) interrogaron a los concejales sobre el futuro inmediato de la actividad. La institución que preside el ingeniero agrónomo Hugo Inza formuló sus inquietudes a los legisladores municipales al entender que “la mayoría de los comercios va a requerir una renovación de la habilitación municipal y que dicha Ordenanza contempla un período de cuatro años para la reubicación de los depósitos”.

Por ello “sería de nuestro interés conocer los criterios a utilizar para el otorgamiento de las prórrogas que contempla la Ordenanza”, puntualiza la nota del CIAT.

Sobre este punto Meli anticipó que junto a sus pares del bloque radical “nos atenemos a lo dispuesto por la norma sancionada el año pasado, tomando la precaución de que la zona de ubicación sea de fácil acceso para la entrega y despacho de mercaderías y el desplazamiento de bomberos. Asimismo debemos tener en cuenta que se trate de una zona despejada que permita supervisión rápida y continua”.

Cabe agregar que la mayoría de las habilitaciones que hasta ahora se han otorgado por vía de excepción tienen como eje el corredor de la Ruta Nacional 226, por ser esta una zona relativamente alejada de viviendas y que posee fácil acceso para vehículos de carga, necesarios para el transporte de los productos en cuestión.