Médicos y administrativos se reunieron con los integrantes de la Comisión de Salud por la situación del Dispensario de Vías Respiratorias.
La Comisión de Salud recibió a una comitiva del Centro de Neumotisiología integrada por los médicos Sebastián Salituri e Ignacio Migueles y el administrativo Sergio Borda, quienes dialogaron con el presidente Adolfo Loreal, Araceli De Vanna, Marcos Nicolini, Pablo Díaz Cisneros y Rogelio Iparraguirre.
De la extensa reunión se concluye -en cuanto al accionar del Concejo Deliberante- la posibilidad de que opere en este caso como mediador de un conflicto para favorecer instancias de diálogo que aproximen de modo gradual y progresivo las posiciones en conflicto.
Por otra parte, los ediles recordaron que la integración al Sistema Integrado de Salud del Centro de Prevención de Adicciones (CPA) y del Centro de Neumotisiología (Dispensario de Vías Respiratorias) surgió de un convenio entre la Provincia y el Municipio que fue convalidado por unanimidad.
Los trabajadores del dispensario plantearon la preocupación de que la reorganización implique la desaparición del Servicio de Neumotisiología o la pérdida de la calidad de las prestaciones.
Refirieron que esa calidad implica la agilidad e inmediatez de administración de electroencefalogramas, Rayos X de tórax, laboratorios en general, espirometrías y contar con equipos de profesionales especializados.
En la reunión quedó claro que el conflicto abarca los casos particulares de entre tres y seis profesionales de los 45 trabajadores que pertenecen al centro. “En principio estos trabajadores serían especialistas en niños y, dado que el Centro de Neumotisiología atendería adultos, ellos pasarían a prestar servicios en el Hospital de Niños”, comentó Loreal.
Por otra parte, los profesionales hicieron expreso su agrado y conformidad con la incorporación al Sistema Integrado de Salud y con la atención de enfermedades crónicas no transmisibles, cuestión esta última que desarrollan desde hace años.
Los referentes del dispensario insistieron en que hubo falta de comunicación y de información desde la dirección del centro, en particular en los primeros momentos, lo que llevó a que reinara la incertidumbre entre los trabajadores.
Los integrantes de la comisión legislativa preguntaron puntualmente sobre la amenaza que ven en estas modificaciones; la respuesta se centró en el temor a una pérdida de calidad del servicio, ya que si los profesionales pasan a atender en general enfermedades crónicas no transmisibles, podría afectarse la calidad de atención de neumotisiología.
Dicho esto fueron interrogados sobre la cantidad de esos casos específicos. “En el año 2011 el Sor Ludovica de La Plata tenía once casos de tuberculosis en niños y aquí teníamos tres, lo que era alto para Tandil y la región en comparación con el hospital provincial. Hoy no tenemos ningún caso en niños. Los casos actuales son en un 90 % casos de asma u obstrucciones bronquiales”, explicaron los médicos.
En cuanto a las cuestiones administrativas, los profesionales comentaron que el Ministerio de Salud de la Provincia les notificará en breve las decisiones sobre personal y funcionamiento del sistema.