El Concejo Deliberante, el Municipio de Tandil y la Universidad Nacional del Centro firmaron un convenio que plasma el trabajo realizado en el marco del proyecto de circuitos electorales, que busca mejorar la accesibilidad a los centros de votación en futuras elecciones, reduciendo la distancia que deben recorrer los ciudadanos.

Para llevar a cabo esa modificación se requiere un estudio profundo de las características geográficas, de la infraestructura edilicia disponible y -a partir de estas variables- una redistribución que implicará que los tandilenses no sean asignados a una escuela por orden alfabeto sino que emitan sufragio en el establecimiento más cercano a su domicilio.

En las mesas de trabajo donde se abordó la cuestión se propuso que ningún vecino tenga que desplazarse más de ocho cuadras los días de votación. Alrededor de esa premisa gira el estudio del Centro de Investigaciones Geográficas, que ya logró avances significativos.

Luego de la rúbrica del convenio por el jefe de gobierno -Miguel Lunghi-, el presidente de la legislatura municipal -Juan Pablo Frolik -y el rector de la universidad -Roberto Tassara-, los profesionales de la casa de altos estudios elaborarán un anteproyecto sobre la subdivisión de Tandil en circuitos electorales. Ese borrador será presentado a principios de julio.

A partir de la rúbrica de este acuerdo se podrá acceder a una materia fundamental: la propuesta real y concreta sobre la división de la ciudad en estos circuitos, que podrían ser seis, diez o catorce.
El grupo de trabajo que incluye a los concejales de todos los bloques como representantes de la diversidad de la sociedad los partidos políticos y los profesionales de la Unicen como autores del proyecto técnico, decidirá cuál de las alternativas implementar. A esa reunión, donde se fundamentará la elección de una de las distribuciones propuestas, asistirán representantes de la Cámara Nacional Electoral, organismo que supervisa la novedosa iniciativa.
Luego, también durante julio, la propuesta definitiva será puesta a consideración de los concejales y, una vez logre ser aprobada, se la elevará a la instancia definitiva de la Cámara Nacional Electoral para su homologación.